Matador a sangre fria

"Perdon por condenarte" para decirle el "patito" Galmarini al jugador sanjuanino. El Matador volvio al triunfo, pasando del sufrimiento del comienzo a la solidez del final. Con una tarea formidfable de Dani Islas al comienzo del encuentro y de Castaño regulando y quitando en el segundo tiempo, el matador construyo una victoria que se necesitaba y mucho. Ya se vuelve a hablar de copas en Victoria, mientras que en sanjuan ya le van diciendo adios a la categoria.

Las cronicas de la pagina y de ole mas los goles son lo que viene:

Tigre volvió a rugir

En San Juan, jugando un muy buen segundo tiempo, dio vuelta el resultado y venció merecidamente por 2 a 1 a San Martín. Así volvió a sumar de a tres con goles de Pratto en la primera etapa y Castaño, cerca del final.

Tigre recuperó la memoria, el rendimiento y logró cortar la serie de 8 fechas sin triunfos, triunfando merecidamente por primera vez en tierra sanjuanina.

El cambio de esquema, con línea de 4 en el fondo y laterales con mucha proyección, tardó en acoplarse pero a la larga terminó dando sus frutos, haciendo una defensa infranqueable durante toda la segunda etapa por arriba y abajo, y convirtiendo a San Román en una continua carta de ataque por el sector derecho.

La primera del partido la tuvo Tigre, de la mano de Ereros quien tomó un envío cruzado en el área pero erró en la definición. Tras esta jugada San Martín fue decidido en busca de hacer diferencia y las dudas comenzaron a aflorar, sobre todo en los envíos aéreos donde los hombres locales aparecían casi siempre en soledad y en una de las primeras que tuvieron, Recalde anotó un golazo de cabeza entrando por el primer palo.

Los centros se sucedían, el mediocampo no lograba hacer pie y la defensa parecía desbordarse, desacomodada ante cada embate sanjuanino que hacía sucumbir el arco de Islas y lo transformaba en figura.

Tigre comenzó a salir tímidamente, consciente de que generar peligro le está costando, pero así y todo niveló el partido y consiguió las chances para merecer el empate: primero un pase en profundidad a Ereros, que dentro del área eludió a su marca y la picó cruzado ante la salida de Medrán para que la pelota fuera devuelta por el poste; luego, un pelotazo largo que Galmarini, apareciendo por sorpresa, tomó para encarar hacia el mano a mano y fue derrivado dentro del área por el arquero sin que Laverni sancionara la infracción.

Esto impulsó a Tigre que se animó a más y ya en los últimos minutos consiguió el empate tras un lateral en el que Rusculleda, de poca pero precisa participación, habilitó a Pratto entre los centrales que tomó la pelota tras una serie de rebotes y definió a la red.

El segundo tiempo se jugó al ritmo que impuso Tigre, dominando la escena, territorial y futbolísticamente. Creció la figura de Castaño, haciéndose dueño de la mitad, y así la del resto de sus compañeros, con la conducción de Román Martínez, las proyecciones de San Román y el sacrificio de Ereros y de un incansable Pratto, que no dio una sola pelota por perdida.
San Martín chocaba una y otra vez contra Fontanello y compañía, aunque la más clara la tuvo tras una acción en la que convirtió un gol bien anulado por el asistente.

Con un planteo inteligente, Tigre aprovechó los espacios y, de contraataque, generó numerosas situaciones de gol. Lo tuvo Pratto en un par ocasiones, lo tuvo Ereros tras una magnífica pared, lo tuvo Rusculleda desde media distancia. El conjunto de Cagna merecía más, pero no lograba plasmarlo en la red.

Sobre el final, la expulsión de De La Fuente presagiaba que algo más podía pasar: Pratto presionó la salida de Medrán y logró cabecear con destino de gol su despeje, pero el arquero reaccionó enviando al córner. El centro pasado encontró a Leyes por el segundo palo, quien la bajó al medio para que Castaño la empujara a la red.

En tiempo cumplido Tigre se alzaba con una victoria merecida, con una gran segunda etapa que sirve para retomar la confianza en las propias armas y en el camino a seguir de aquí hasta el final.

Santo en el Infierno

El equipo de Quiroz quedó prácticamente condenado a jugar en la B Nacional en la próxima temporada. Cosechó su séptima derrota consecutiva y está en el último lugar en la tabla del descenso (fueron expulsados De La Fuente y Agüero). Los de Cagna cortaron una racha de ocho sin victorias. Recalde abrió la cuenta para el local, pero Pratto y Castaño lo dieron vuelta para el Matador.

La permanencia de San Martín de San Juan en la máxima categoría del fútbol argentino entró esta noche en una irremediable agonía porque perdió sobre la hora ante Tigre 2-1 en el Estadio Hilario Sánchez.

El tanto decisivo lo marcó Diego Castaño a dos minutos del epílogo de este adelanto de la 16ª fecha del Clausura. En el primer tiempo el paraguayo Carlos Recalde había puesto en ventaja a los locales a los 11 minutos, pero Lucas Pratto igualó a los 44 de esa etapa.

El verdinegro necesitaba ganar imperiosamente porque su promedio lo dejó en una situación crítica y apenas quedan tres fechas para el desenlace de la temporada. Pero de los últimos veintiún puntos la formación cuyana los perdió todos, por lo que se quedó sin margen de error y ya está prácticamente condenada al descenso. A poco del final San Martín sufrió la expulsión de Fernando De la Fuente por sus protestas y ni bien concluyó el juego Ariel Agüero recibió una tarjeta roja por el mismo motivo.

En cambio Tigre rompió una racha negativa, pero igual le va a resultar muy difícil acceder a la Copa Sudamericana 2008. San Martin salió decidido a buscar el triunfo y se llevó por delante a Tigre.

Sin embargo fue el conjunto de Victoria el que tuvo la primera chance a los 15 minutos, pero el remate de Pratto dio en la parte externa de la red. El local contestó un minuto después. Martín Bravo guapeó y quedó solo frente a Daniel Islas, pero definió mal.

El ímpetu de los sanjuaninos tuvo su premio a los 11 minutos porque un envío del paraguayo Juan Irrazábal cayó en el área y Recalde de cabeza superó al arquero. El gol confundió a Tigre y San Martín lo acorraló, pero otra vez el anfitrión estuvo flojo en la definición y desaprovechó cuatro situaciones favorables en sólo cinco minutos.

A los 21, Tigre salió de su letargo y de contragolpe Sebastián Ereros estrelló un remate en el palo izquierdo. Sobre la media hora San Martín bajó el ritmo y el visitante emparejó las acciones. Ambos compartían el manejo del balón y los errores hasta que, a los 43, después de una serie de rebotes, la pelota le quedó Pratto, muy solo, y el delantero marcó el empate.

Ni bien terminó la primera parte el guardavalla Ezequiel Medrán encabezó un reclamo masivo con el argumento de que Pratto en la escena clave estaba en posición adelantada, pero el árbitro Saúl Laverni le puso freno con una tarjeta amarilla.

En el segunda mitad fue Tigre el que arrancó mejor, apoyado en la precisión de sus volantes y la velocidad de sus delanteros. Así ahogó a San Martín en todos los sectores del campo. Por su parte y en busca de soluciones, Fernando Quiroz mandó a la cancha a Lucas Nanía y Fernando Merlo para intentar recuperar el dominio y lo consiguió.

De a poco el conjunto bonaerense se refugió en el fondo para salir de contraataque y por esa vía a los 21 pudo llegar el desnivel, pero Pratto terminó mal un ataque elaborado por Sebastián Rusculleda y Ereros. San Martín tuvo una chance neta a los 26. Marcelo Laciar quedó solo, pero demoró en acomodarse y fue bloqueado por Diego Leyes. Los de Teté Quiroz procuraron conseguir el gol del alivio, pero les va tan mal que Leyes bajó una pelota en el área local y Castaño los remató